Estoy perdida.
Ya está, ya lo he dicho en «voz
alta».
Sí, sí: yo. La de las ideas
claras. La que siempre ha tenido todo planeado en su vida. Pues ya no.
Este 2014 ha sido un año de transición. Como algunos de
esos capítulos en nuestros libros favoritos que muchos critican, pero quienes
escribimos sabemos que son necesarios. El problema es que olvidé que a veces sentirse perdido/a, es necesario.
Toda mi vida ha ido encauzada a
través de objetivos que he ido consiguiendo con un mayor o menor esfuerzo. A
veces pienso que es porque tenía unos objetivos
cómodos. Y hasta aquí me han traído. Al desconcierto.
Cierto es que este 2014 me ha
traído gente maravillosa, caras nuevas, cambios
de chip. He aprendido mucho sobre mí misma. He aprendido a canalizarme.
Me he dado cuenta de que no parto
tan de cero como yo creía. Quizás
parto de uno, pero oye, ya no es un cero patatero.
Ahora tengo objetivos difíciles, que son complicados me asustan. Y no es que sea una
enganchada del miedo, pero creo que aquí comienza mi reto personal y sobre todo,
profesional. ¿Hasta dónde puedo llegar?, ¿cuál es el límite, si es que
acaso hay un límite?
Nadie sabe aún si conseguiré esa
meta laboral deseada —compuesta de esos objetivos que me incomodan— en este
2015. Pero vamos a empezar por los objetivos. Porque habrá un 2016. Y un 2017. Y contando…
El ir gastando calendarios, no solo es eso, se va ganando en madurez. Enhorabuena.
ResponderEliminarDicen que si algo te da miedo, es que merece la pena :) Suerte
ResponderEliminarPues la verdad es que yo todo lo contrario, si que es cierto que mi 2014 ha marcado un antes y un después, pero no ha ido muy bien que digamos. Espero que este año te vaya bien!
ResponderEliminarSaludos! te sigo^^
No me puedo sentir más identificada con tu 2014, lo has trazado paralelo al mío. Espero que alcances esos objetivos, seguro que si son incómodos es porque valen.
ResponderEliminarUn abrazo :)
Creo que estoy en el mismo punto que tú, o al menos en uno muy parecido. Este 2015 se me antoja difícil, lleno de pequeños miedos a superar. Hablabas de los objetivos cómodos... pero creo que ahora, aunque nos enfrentemos a una jauría diferente, podemos marcarnos los mismos cómodos objetivos e ir pasito a pasito, sin agobiarnos. Sin pensar qué será de nosotros en mayo o junio, que aún queda muy lejos.
ResponderEliminarTranquila, poco a poco lo iremos consiguiendo. Sudaremos más o menos, tendremos que sacar uñas y dientes, tendremos que saltar hacia el abismo de la zona de confort, pero lo lograremos. Lo lograrás ;)
Besos