miércoles, 25 de junio de 2014

Bum bum, bum bum



A veces me entra el miedo y mi corazón empieza a latir más rápido de lo que ya lo hace, y la verdad, eso es mucho.

Por desgracia no es la primera vez que reacciona así, y ya conozco al dedillo lo que le pasa: presiente que le van a hacer daño, que se va a romper.

Por suerte nunca es tan grave como él se piensa: sólo se resquiebra un poco, nada que los días no cicatricen.

Lo peor de todo es cuando es una herida que está a punto de cicatrizar se reabre. La historia de mi vida. Siempre da en el punto de sutura.

Cuando esto sucede, el pobre se pasa la noche palpitando como si fuese una bomba de relojería, y a mí me toca quedarme en vela con él, para que no se sienta más sólo de lo que se cree.


...y qué tranquila duerme tu cabeza. 

martes, 10 de junio de 2014

Pérdidas y ganancias



Las pérdidas son ganancias. Albert Espinosa.

Antes que nada debería aclarar que renunciar no es perder. Nunca puedes perder cuando aprendes algo o simplemente dicha acción te va a reportar una tranquilidad, ya sea emocional, económica o moral.

Me gusta pensar que hay situaciones por las que todos vamos a pasar por nuestras vidas. Platos de mal gusto que necesitamos probar para seguir avanzando, para conocernos un poco más a nosotros mismos, para saber nuestros límites. Para aprender cuándo debemos decir no.


A ti, que me estás leyendo, te aseguro que te llegará ese momento –si no lo has vivido ya–; y estoy completamente segura de que te sentirás tan realizado/a que lo saborearás como la más dulce de las victorias.