domingo, 12 de octubre de 2014

Decisiones


Durante toda mi vida he tenido las cosas muy claras. Sabía lo que me gustaba y lo que no. Me iba fijando una meta tras otra y todas las iba cumpliendo. Nunca fui una alumna de sobresaliente, pero iba alcanzando todo lo que me proponía.

Creo que era una de esas cosas que me identificaban. Mientras compañeros y amigos se mostraban indecisos sobre temas como su futuro, yo me informaba sobre las asignaturas de la carrera que iba a elegir.

Y ahora me encuentro en esta etapa de falsa confusión. Pues no es confusión sino interés por todo. Me gustan  y apasionan tantas cosas que me da miedo elegir una por la posibilidad de perder las otras. Me apasionan los Social Media, el Marketing, la escritura… Siempre fui una persona dinámica.

Supongo que se trata de otra etapa de la que aprender. 

3 comentarios:

  1. El otro día me sorprendía pensando algo parecido. Me gustan muchas cosas, a parte de la que me he estado preparando durante varios años, y entonces me preguntaba si no me estaría perdiendo otras cosas, si no estaría bien probar caminos diferentes, abrir nuevas puertas.

    Todo sea por, al final, encontrar donde estemos más a gusto.

    Besos

    ResponderEliminar
  2. Creo que eso es lo malo de crecer, que vemos que las decisiones que tomamos cada vez son más... permanentes, más dificiles de cambiar, nos asusta, no podemos, nos cerramos caminos, etc. Yo me he preguntado lo mismo mil veces, solo tienes que cerrar los ojos y pensar ¿estoy haciendo lo que quiero? Un beso enorme

    ResponderEliminar
  3. Decidir es complicado, incluso si eres una persona segura. Yo, personalmente, cuando no sé qué hacer me dejo guiar por mi instinto ;)

    ResponderEliminar

Muchas gracias por dejar tu huella.